📅 Día 10: CUANDO NECESITAS ESPERANZA
📖 Lee: SALMOS 73: 14-28 (Haz clic en el versículo para leerlo 😃)
Asaf pensó que había recibido un trato injusto. La injusticia lo estaba consumiendo. Cuando su experiencia y la verdad de Dios no parecían coincidir, este hombre maduro y piadoso derramó su corazón a Dios. Su angustia y la revelación que surgió de ella se conservan para nosotros en este notable salmo.
Los pensamientos que Asaf expresó son un modelo para nosotros. Lee estas palabras con cualquier injusticia u ofensa que hayas experimentado en mente. Siempre que luches con las injusticias de la vida, sigue su ejemplo. Toma los pasos específicos que él nos muestra: (1) Derrama tu corazón ante Dios; (2) considera tus opciones cuidadosamente; (3) ve el panorama general; (4) y reafirma tu relación con Dios. Un cambio de perspectiva puede deshacer poderosamente la injusticia que sientes.
Ese principio es exactamente lo que provocó el punto de inflexión en el salmo de Asaf (v. 16-17). Cuando entramos en la presencia de Dios, su "santuario", y nos ponemos a la luz de su verdad, empezamos a ver las cosas desde una perspectiva eterna. Asaf había estado a punto de rendirse - "Yo estuve a punto de caer, y poco me faltó para que resbalara." (v. 2) - porque sólo veía sus propias circunstancias en el momento. Pensó que no había tenido ningún beneficio el mantener su corazón puro y seguir a Dios. Tuvo que experimentar la presencia de Dios para ver de manera diferente. Cuando nos enfocamos en la injusticia que nos han hecho, dejamos de ver con claridad. Cuando damos un paso atrás y permitimos que Dios nos muestre el panorama general, reconocemos cuán momentáneos son nuestros problemas a la luz de la eternidad. Cuando nos situamos al final y miramos hacia atrás, "en nada se comparan los sufrimientos actuales con la gloria que habrá de revelarse en nosotros." (Ro. 8:18).
Dios usará un trato injusto para construir tu carácter, cambiar tu vida, darte un testimonio y cumplir un propósito mayor. Pero tienes que aguantar, confiando en que él dará un buen término. La única manera de tener fe para soportar lo que no tienen sentido en el presente es cambiar el enfoque de las circunstancias y volver al panorama general. Dios promete que todo saldrá bien (Ro. 8:28). Al final, verás que tu trato injusto resultó ser realmente bueno.
