📅 Día 5: CUANDO EL MIEDO TE ATRAPA
📖 Lee: SALMOS 46: 1-7 (Haz clic en el versículo para leerlo 😃)
En los márgenes de mi Biblia, junto al Salmo 46, hay una nota escrita con tinta verde: "Centro Médico Duke, 2/19/92. (Mamá está muriendo.)" Recuerdo haberla escrito y recuerdo cómo me sumergí desesperadamente en las palabras de este salmo. Necesitaba que Dios fuera mi refugio y mi fuerza, una ayuda siempre presente en los problemas. Necesitaba liberarme de las garras del temor.
Imagina un océano agitado por los vientos violentos de un huracán, sus aguas rugiendo y haciendo espuma. Así es como me sentía, y esa es la imagen que el salmista nos da de su confusión. Es una situación peligrosa y poderosa, y su instinto es recurrir a Dios como su refugio. Incluso en tiempos tan tumultuosos, Dios está ahí con nosotros.
Este salmo revela tres formas en que Dios quiere apoyarnos en las tormentas de nuestras vidas: (1) Él es nuestro refugio, nuestra protección de las fuerzas externas que nos rodean. No siempre elimina esas fuerzas, pero nos rodea con sus brazos y se convierte en el refugio más seguro que podemos tener. (2) Él es nuestra fuerza, una fuerza interna para soportar el momento que enfrentamos. No almacena esta fuerza para el mañana; nos da la gracia para el hoy. Mañana nos la dará para mañana. Nos da la gracia necesaria cada día. (3) Él es una ayuda muy presente en tiempos de problemas. No importa cuán inesperadas y abrumadoras sean nuestras circunstancias, él siempre está disponible.
Los Evangelios nos dan una maravillosa imagen de este Dios siempre presente que nos protege y fortalece. Una tormenta violenta cayó sobre los discípulos en el Mar de Galilea, y estaban aterrorizados. Despertaron a Jesús, que de alguna manera pudo dormir mientras las olas se estrellaban a su alrededor, él calmó la tormenta. Estaba allí en la barca con ellos, ofreciendo su fuerza y protección - como lo está haciendo con nosotros hoy.
Dios quiere que sepas que él está a favor tuyo. Él está de tu lado. No está esperando a que te equivoques para poder corregirte. Él está aquí para ti, incluso cuando estás atrapado por el miedo. Él es tu única seguridad verdadera en cualquier situación que enfrentes.